Muy buenas tardes familias,
Como ya sabéis, los rutas estuvieron esta Semana de Pascua pasada en el Cottolengo de Las Hurdes, Cáceres. Para poder contar su experiencia, ¿qué mejor que lo hagan ellos mismos?
Esperamos que os guste su experiencia (muchas gracias a todos los que, comprándonos cosas en Navidad, lo habéis hecho posible!!!)
Esta semana de Pascua los rutas hemos ido a Cáceres, concretamente al Cottolengo de las Hurdes, una de las zonas más pobres de España. Pero nuestro campamento no ha sido convencional; no ha habido tiempo de juegos ni pasatiempos, hemos estado atendiendo a los acogidos del Cottolengo, personas que, en su mayoría, no pueden valerse por sí mismas para comer, vestirse ni andar. A pesar de que hemos ido a ayudarles, lo que hemos dado no es comparable a lo que hemos recibido.
Hemos descubierto, en primer lugar, que, a pesar de la inseguridad de los primeros días, con caridad y ayuda de Dios, somos capaces de darnos a los demás. Además, ellos, que no tienen nada, nos han enseñado que no es necesario nada material para ser feliz; que sólo Dios basta.
Nos sentimos profundamente agradecidos por haber tenido esta experiencia de Dios, y nos damos cuenta de que ¡es verdad que en cada persona está Jesús verdaderamente! Cuando hemos tenido esto en cuenta, hemos visto que no son los hechos concretos los que importan, sino hacerlos por la Caridad.
Por último, durante este tiempo, hemos sentido la importancia de la oración y, en especial, de la Eucaristía diaria como fuente de energía para poder llevar el cansado trabajo con amor.
Todo se resume en “Amar a Dios, y a los pobrecitos por amor a Dios”, Padre Alegre.
Rutas de Santa Teresa. IV Generación.
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